martes, 25 de abril de 2017

Receta para un asesino serial (XVII)


David Berkowitz y la venganza por el abandono.

El estadounidense no soportaba ver la gente feliz, así que empuñaba su pistola calibre 44 y asesinaba sin piedad a quien se atravesaba en su camino.

Las autoridades lograron saber que era sólo un asesino por el tipo de arma y el tipo de víctimas, siempre atacó a mitad de la noche y las vidas que arrebató eran de personas que caminaban por la calle a horas indebidas, logró liquidar a seis y herir a otras siete.

Su poca autoestima lo llevaba a dejar notas para la policía pidiendo que lo atraparan y aseguraba que oía voces que le ordenaban matar.

David era un joven solitario con un origen muy triste, fue abandonado por su madre biológica a pocos días de nacido, fue adoptado por el matrimonio compuesto por Nat y Pearl Berkowitz y a pesar de ser amado siempre mostró inestabilidad emocional, de forma recurrente alternaba episodios depresivos con los de rabia incontenible, estos incidentes empeoraron cuando murió su madre adoptiva, otro factor para desencadenar su frustración fue la poca suerte que tuvo para con las mujeres, aunado a que conocía su origen, lo que le causaba un sentimiento de abandono constante.

Luego de mucho meditarlo buscó a su madre biológica e intentó un acercamiento con ella sin embargo tuvo poco éxito, su sorpresa fue mayor al descubrir que tenía una hermana que sí creció en el seno materno y por ello cuestionó a quien le diera la vida el por qué debió crecer sin sus cuidados, las respuestas no le dejaron satisfecho, razón por la cual estaba deseoso de llamar la atención.

Así, un día se compró un revólver 44 y de acuerdo a sus primeras declaraciones, las voces que le ordenaron los asesinatos salían de los ladridos del perro de sus vecinos llamado Sam, motivo por el cual firmaba las notas como “el hijo de Sam”, claro que no tenía problemas mentales, simplemente los complejos que sufría lo orillaron a tomar decisiones drásticas.

Es importante señalar que la primera relación con una mujer por parte del varón es con su madre, dependiendo del trato, los hijos aprenden cómo deben convivir con el género opuesto, así, puesto que lo primero en recibir fue rechazo, se fue transformando en una persona insegura e insocial, sobre todo con sus pares femeninos.

Fue así que nació el “hijo de Sam” tan práctico y simple en sus crímenes, sin embargo logró mantener en vilo a toda una sociedad que al poco tiempo y con la alerta de las autoridades fue dejando la vida nocturna y tomó mayores precauciones al salir de noche.

La ciudad estuvo sitiada por este asesino en serie durante un año, hasta que el 31 de julio de 1977, le disparó a sus últimas presas, una pareja que charlaba en un auto estacionado, la joven murió en el hospital mientras que el hombre quedó ciego.

Berkowitz fue arrestado por una multa de tránsito, cuando el oficial se acercó, reía como maniaco y le dijo al oficial: “Soy yo, yo soy el hijo de Sam, ¿por qué tardaron tanto?”. Él esperaba que lo tomaran en cuenta pero la reacción del elemento policiaco no fue la que David esperaba, fue llevado a una delegación donde confesó haber recibido órdenes del perro de sus vecinos que a su vez estaba poseído por un demonio y le pedía que saliera a matar, al poco tiempo cambió esta versión y dijo que él sólo había asesinado a tres objetivos y que a las otras víctimas las habían atacado los miembros de una secta satánica a la que él también pertenecía.

El caso de “el hijo de Sam” es un claro ejemplo de una persona con trastornos de paranoia y antisocial, sus rasgos de personalidad lo encaminan a ser una persona co-dependiente emocional puesto que de haber tenido el afecto que necesitó desde su infancia, es muy probable que su historia fuera otra completamente diferente, no era un amor cualquiera, sino el de su madre, aspecto de su vida que nunca pudo superar a pesar de contar con un entorno familiar que le brindó bienestar, lo cual demuestra que la separación materna es un factor que determina en buen porcentaje el comportamiento en la vida adulta de cualquier individuo.

Continuará…

Por: Lourdes Guerrero / @Agnte_1

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